Rescatados cuatro alpinistas de Barcelona sepultados por un alud en el corredor de Estasen
Los equipos de montaña de la Guardia Civil de Huesca han activado este fin de semana cinco operaciones de rescate y han auxiliado a nueve personas en el Pirineo aragonés. La intervención más complicada ha sido la evacuación de cuatro alpinistas catalanes que este sábado han quedado sepultados por un alud en el corredor de Estasen, una de las vías de ascenso al Aneto. Tres de ellos han sufrido lesiones de carácter leve y uno ha resultado con una pierna rota.
Tras recibir el aviso a las 16.55 horas, se activaron los especialistas de los Grupos de Rescate Especial de Intervención en Montaña (GREIM) de Benasque, junto a una Unidad Aérea y médico de 061.
La Guardia Civil de Huesca ha informado en una nota de prensa que, tras una arriesgada maniobra de apoyo parcial del vehículo, debido a las fuertes rachas de viento, se ha depositado a los especialistas de montaña y al médico en el lugar donde se encontraban estas cuatro personas.
Por la existencia de un riesgo muy elevado de que se produjera un nuevo alud, fueron evacuados primero los tres heridos leves, mientras el doctor asistía al lesionado más grave, que ha sufrido una fractura en la pierna.
Al final, los tres primeros fueron trasladados en ambulancia hasta el Hospital de Barbastro y el herido más grave, en helicóptero hasta el Hospital San Jorge de Huesca. Se trata de tres mujeres y un hombre de entre 41 y 60 años y vecinos de Barcelona.
También este sábado, a las 12.25 horas, se ha realizado el rescate de otro alpinista, vecino de Zaragoza de 30 años, que se encontraba acompañado de su perro, en la cima del pico Infiernos, en Panticosa, cuando al intentar pasar de la parte oriental a la cima central, se desprendió una cornisa de nieve que provocó la caída del animal unos 20 metros.
El hombre solicitó ayuda porque temía por su vida si seguía avanzando. Hasta el lugar, acudieron especialistas del GREIM de Panticosa con apoyo de la Unidad Aérea de la Guardia Civil en Huesca. Una vez allí y tras asegurar al hombre, se localizó al perro, ambos ilesos, pudiendo proseguir por sus propios medios después de ser trasladados a una zona segura.
Asimismo, a las 14.30 horas, preciso ayuda un senderista zaragozano, de 42 años, al extraviarse en la ribera del río Aragón, mientras realizaba una etapa del Camino de Santiago, a la altura de la localidad de Berdún.
Componentes del Servicio de Rescate e Intervención en Montaña (SEREIM) de Jaca junto con una unidad aérea y un sanitario del 061 localizaron al hombre, procediendo a su auxilio, ya que se encontraba agotado y desorientado.
El último rescate de la jornada se produjo a las 19.15 horas. Fue un senderista accidentado en el barranco de las Gorgas de San Julián, en el término municipal de Nueno. El hombre, vecino de Zaragoza, de 48 años, se había lesionado el tobillo y no podía continuar por su propio pie.
Miembros del EREIM con Unidad Aérea de la Guardia Civil de Huesca y médico del 061 fueron al lugar y, tras examinar e inmovilizar la lesión, extrajeron al hombre mediante un ciclo grúa desde el interior del barranco para ser llevado hasta el Hospital San Jorge de Huesca.
También resultó arriesgado el rescate de dos escaladores enriscados cerca de la vía Tangerine Dream (Las Peñas de Riglos). Era el viernes y se habían quedado colgados en una repisa de la cara norte del Mallo Pisón al engancharse las cuerdas cuando trataban de descender en rápel.
El helicóptero llevó hasta la cima a los especialistas del Ereim de la Guardia Civil de Huesca, que descendieron unos 150 metros hasta llegar al lugar donde se habían enredado las cuerdas de los escaladores para que pudieran bajar por sus propios medios hasta el suelo, ya que estaban ilesos. Las personas auxiliadas eran una mujer de 28 años y un hombre de 42, vecinos de Zaragoza.
