El nacimiento de 13 cachorros aumenta a 76 la población de osos en los Pirineos
Los Pirineos van viendo, poco a poco, crecer su población de osos pardos. Ahora, ya son 76 los ejemplares contabilizados, tras el nacimiento de trece cachorros durante el 2022.
Son datos que ha dado a conocer el Grupo de Seguimiento Transfronterizo del Oso Pardo en el Pirineo (GSTOP) tras realizar el balance anual de la población y de las actuaciones de seguimiento y conservación.
Según el GSTOP, hay tendencia creciente con respecto a años anteriores en la reproducción de la especie y un auge desde su reintroducción en los Pirineos en 1996.
En el total de la cordillera pirenaica la población pasó de 68 a 69 ejemplares en 2020 y de 70 a 74 ejemplares en 2021.
En el caso de Catalunya, se han detectado 38 ejemplares en Val d'Aran, Pallars Sobirà y Alta Ribagorça. Entre los ejemplares contabilizados en todo el Pirineo, se han identificado 21 adultos, 11 subadultos y 6 cachorros, de los cuales 20 son machos, 17 hembras y 1 cuyo sexo no se ha podido determinar.
El GSTOP, formado por representantes del Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural, el Cuerpo de Agentes Rurales, el Conselh Generau d'Aran y los gobiernos de Andorra, Francia, Aragón y Navarra, ha señalado que el área geográfica del oso pardo se ha reducido en 800 kilómetros cuadrados en comparación con 2021, abarcando ahora una superficie de 5.700 kilómetros cuadrados, debido a la falta de ejemplares con seguimiento satelital.
La población contabilizada en 2022 se compone de 39 hembras, 35 machos y 2 ejemplares de sexo no identificado.
Del total, 51,5% son adultos, 31,5% son jóvenes y 17% son cachorros del año, incluyendo 6 hembras, 5 machos y 2 cuyo sexo no se ha podido determinar. Desde 1996, han nacido 128 crías de 71 camadas.
En cuanto al seguimiento de la especie en Catalunya, se han recogido 1.146 indicios de oso pardo en 2022, incluyendo pelos (440), fotoparamiento (413), heces (170) y 37 observaciones.
En todos los Pirineos, se han detectado un total de 2.584 indicios o rastros, y se han analizado más de 760 muestras en laboratorios para la identificación genética.
El GSTOP también ha anunciado un cambio de nomenclatura para los ejemplares de oso pardo, para evitar confusiones en los códigos de laboratorio, asignando ahora un código formado por una letra (M, F o D) y un número de tres cifras según su edad y antigüedad. Por ejemplo, la hembra Ziva es F001 y un cachorro macho nacido en 2020 es M138.
