El efecto “boomerang” de una valla en Austria para evitar selfis de Frozen
Más de un millón de turistas se dirigen a Hallstatt cada año para tomarse fotografías desde sus pintorescas vistas, junto a un lago en las montañas de Austria.
Muchos más desde que, según los rumores, fue la inspiración para la tierra mágica en la película Frozen de Disney.
La popularidad de Hallstatt no entiende de fronteras e incluso se ha construido una réplica de la ciudad en Guangdong, en China. El alcalde de Hallstatt incluso voló a China para participar en la ceremonia de apertura de dicha “copia”.
Si bien, millones de turistas visitan la ciudad cada año, solo unos pocos cientos de personas viven en ella.
Hallstatt es también un sitio declarado Patrimonio Mundial de la Unesco, lo que significa que está protegido como un lugar especial debido a su historia.
A mediados de mayo, los visitantes pudieron advertir que se había colocado una valla de madera para ocultar la famosa vista donde se tomaban los selfis.
El alcalde, Alexander Scheutz, dijo a los periódicos austriacos que la gente que vive en la zona quería que la dejaran en paz y que el objetivo de la barrera era evitar que los turistas se hicieran selfis.
No es la única medida que se ha tomado; Hallstatt ha establecido límites para automóviles y autobuses, pero regularmente se superan los 450 automóviles y 54 autobuses diarios que se permiten.
A diferencia del límite de vehículos diarios, aunque no se respete, la idea de colocar una barrera para impedir selfis tuvo un efecto boomerang y los turistas empezaron a inmortalizarse delante de la valla, convirtiéndose en un escenario incluso más codiciado que antes.
Resultado, la barrera ya se ha retirado, apenas ha durado una semana, pero el alcalde Sheutz dice que quiere que se coloque una pancarta para recordar a los turistas que hay gente que vive en la ciudad.
Esta no es la primera vez que se insta a los turistas a que reduzcan la toma de fotografías en destinos turísticos populares.
En Portofino, en Italia, el alcalde afirmó que había 'caos' en la ciudad debido a que todos los turistas venían a tomar fotografías de la vista de las coloridas casas con vistas al mar, y a los turistas se les prohibió permanecer demasiado tiempo en determinados puntos.